En Centro Pixels hemos celebrado recientemente nuestra primera Game Jam en la cual ha participado el alumnado tanto del Máster presencial de Ilustración digital y Concept art, como el del Máster presencial de Programación de videojuegos.
¿Qué es una Game Jam?
Desde hace unos años ha ido proliferando en el mundo de los videojuegos el concepto de las Game Jam, un encuentro de desarrolladores de toda clase de disciplinas (programación, diseño, arte, música, etc.) y edades en el que, en un tiempo limitado y habitualmente con un tema definido, se desarrollan juegos de menor o mayor tamaño con el objetivo de aprender, experimentar y, sobre todo, compartir conocimientos.
Este concepto comenzó en 2002 con la 0th Indie Game Jam, que sus organizadores definieron como un evento de diseño y programación de juegos «para fomentar la experimentación y la innovación en la industria del videojuego». Desde entonces se ha ido extendiendo esta práctica, siendo algunas de las más conocidas la Global Game Jam, que se celebra anualmente de forma presencial en diferentes sedes por todo el mundo y la Ludum Dare, similar a la anterior, pero a través de internet. Ambas suelen limitar su duración a un fin de semana, que es lo más habitual, pero hay otras que duran desde una semana hasta cero horas como, por ejemplo, la 0 Hour Game Jam.
Cientificus
Con esto en mente, decidimos organizar a nivel interno una Game Jam en la que ambos grupos podían no solo seguir desarrollando sus trabajos, sino también conocer un poco más del trabajo de otros departamentos.
Así, el proyecto duró casi dos semanas para elegir la idea, desarrollar el concepto y trabajar en ello hasta presentar un proyecto jugable eligiendo entre dos temas que se generaron al azar, que en este caso fueron “No puedes verme” y “Mundos paralelos”.
Desde el primer momento la coordinación entre ambos grupos fue realmente bien, desde el brainstorming inicial poniendo en común todas las ideas que iban surgiendo hasta la entrega del producto final, pasando por una revisión constante tanto por su parte como por la del profesorado, que estuvo en todo momento supervisando, corrigiendo y ayudando para llevar el proyecto a buen puerto.
Finalmente, todo este duro trabajo dio lugar a Cientificus, un juego en el que un científico debe huir de una nave plagada de monstruos planta, quienes fueron la tripulación de la misma, pero se transformaron tras verse afectados por unas extrañas esporas resultado de un experimento fallido.
Tanto la experiencia como el proyecto en sí mismo son añadidos que consideramos que les resultarán realmente útiles dado que este proyecto puede formar parte de un portfolio o un currículum que, esperamos, vaya creciendo cada día y les lleve muy lejos en sus carreras en el mundo del desarrollo de videojuegos.
Os enseñamos algunas capturas del proceso de trabajo:
